Un acto de amorCuando el tiempo no era tiempo y la confusión reinaba en lo existente, la fuerza creadora de Antoninus, la Diosa de la Prosperidad, vio la necesidad de gestar un mundo con una serie de elementos, que pudieran permitir el desarrollo de la vida, de una manera armónica para que fuera próspera la sociedad que allí se estableciera.
Pensó un habitad con los mejores sistemas de alimentación, saludables y agradables a la vista. Para el desarrollo y progreso de sus habitantes un excelente método educativo y que todos sus pobladores, tuvieran su propio espacio, es decir, una vivienda que les permitiera prosperar como familia. Vio entonces que todo eso era bueno y empezó su obra creadora posibilitando un “Sistema Agrícola y de Producción” que sirviera para la buena alimentación de aquellos habitantes; se alegró tanto de ello, porque por medio de lo creado, podían desarrollarse sanos y fuertes, de esta manera, la tristeza y la desolación quedaría desterrada de aquel lugar. La muerte llegaría los pobladores por causas naturales y no producto de la ignominia e injusticia, que buscaba la manera de apoderarse de aquel hermoso lugar. De igual manera, supo que era bueno que el “Sistema Educativo” que allí tuviera lugar, abarcara hasta los sitios más lejanos y los asentamientos más recónditos de aquel territorio; con una educación como esta, garantizaría una mejor calidad de vida a todos los habitantes de aquel terruño de ensueño. Una educación que formara a todos sin acepción, proveyendo asì, un futuro estable. La Diosa de la prosperidad, dicha y felicidad, sintió en su interior la necesidad de seguir garantizando el libre desarrollo de aquellos a quienes les había dado la vida y por eso, quiso impulsar la “Construcción de Viviendas” en vista de la gran cantidad de habitantes, aún no se habían apropiado de aquel terreno y que por miedo a los que todo lo querían para sí, se sentían desamparados en aquel lugar, viviendo en condiciones indignas porque habían ido a parar en terrenos no aptos para habitar (orillas de ríos, quebradas, cerros, etc.) y ella en su infinita sabiduría, sabiendo que esto era bueno, se dio a la tarea de iniciar la transformación en aquel grupo social. De esta manera, Antoninus, Diosa de la Prosperidad, por su misericordia infinita, observaba lo que hacía falta en aquel lugar que garantizara el progreso de sus más hermosas creaturas y fue estableciendo lo necesario para el mejoramiento y desarrollo de la calidad de vida en este pedacito de cielo, lugar de ensueño, donde la Diosa que se caracterizaba por el bienestar de los que amaba; sus maravillosos hijos y todo lo creado eran una sola cosa, reinaba en medio de ellos, la armonía. Y vio que era maravilloso lo que había realizado y se quedó para siempre como aliento de vida para ellos. Autora: Antonia
1 Comentario
Nailett Narváez.
2/11/2017 07:08:15 pm
Felicidades a la diosa de la Prosperidad, siga adelante dando frutos y colocando en alto al Prof. P Nestor.
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AutorNEANCABE Archivos
Septiembre 2020
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